a) En la explotación minera.
En el campo minero, GeoLock es empleado para la consolidación de relaves, laderas y taludes, para evitar que estos se erosionen, tanto por efecto de las lluvias como por el viento, contaminando recursos de agua o llenándolos de sedimentos y causando molestias en las comunidades circundantes.
En el mantenimiento de carreteras afirmadas se usa para controlar el polvo producido al circular los vehículos, así como por acción del viento. Aplicado en bermas y cunetas evita que éstas se colmaten inundando las vías, con el consecuente deterioro de las carreteras, incrementando los costos de mantenimiento por causa de la limpieza y nivelado ("cuchilla").
b)
En la agricultura y la explotación forestal, así como en viticultura,
horticultura y jardinería.
El
objetivo principal de la consolidación del suelo en la agricultura es la
conservación de la tierra arable. Entre la recolección y la siembra, o
después de la siembra, la superficie queda fijada por GeoLock durante el
tiempo necesario hasta que crezca la semilla y las plantas consoliden la tierra
con sus raíces. Dado que las superficies pulverizadas con GeoLock son
permeables al agua y al aire, las semillas se desarrollan excelentemente.
GeoLock
es, así mismo, adecuado para la protección de terrenos cultivados y huertas contra el peligro que representan los vendavales. En
estos casos se
consolidan con GeoLock los terrenos circundantes desde los cuales el viento
podría transportar arena.
La
repoblación forestal de páramos o territorios amenazados de erosión puede
simplificarse y abaratarse considerablemente empleando GeoLock. La simiente
para repoblar, mezclada con GeoLock y fertilizante puede extenderse a máquina,
ahorrando de este modo costosos trabajos preliminares y posteriores, llenos de
riesgos durante el proceso de repoblación.
En
la viticultura GeoLock hace resistente a la lluvia la preciosa tierra
vegetal, incluso tratándose de cuestas empinadas. En este caso pueden
combinarse también la protección antierosiva y la fertilización.
Las
regiones de dunas se consolidan con GeoLock más rápidamente, mejor y de
forma más económica que con los productos convencionales. Los terrenos
costeros baldíos se transforman en zonas verdes, aplicando por pulverización
una mezcla de GeoLock y fertilizante.
En
las regiones de poco sol GeoLock, con una adición de pigmento negro,
aumenta la absorción de los rayos solares, contribuyendo así al aumento de la
temperatura del suelo. Esto redunda en un ventajoso acortamiento de los tiempos
de cultivo en la agricultura y la jardinería, lo que lleva aparejada mayor
economía y, por consiguiente, una rentabilidad más elevada.
c)
En
zonas industriales y urbanizadas
En
la construcción de plantas industriales, barrios residenciales e instalaciones
deportivas, pueden protegerse con GeoLock los terrenos adyacentes, contra el
peligro de las arenas transportadas por el aire. Estas medidas protectoras
temporales han demostrado ser fácilmente practicables y muy eficaces en la
ejecución de obras que alteran el terreno.
Todas
las grandes ciudades, al construir su periferia y erigir ciudades satélites, se
hallan ante el problema de la eliminación de polvo y el recubrimiento vegetal.
Los suelos abiertos y el paisaje destruido deben recomponerse.
Los
montones de basura y escombros deben estabilizarse y repoblarse de plantas.
También en estos casos ayuda el GeoLock a conseguir una consolidación
duradera y un simultáneo recubrimiento vegetal del terreno.
d)
En
zonas esteparias y desérticas.
Para
proteger las zonas industriales y residenciales adyacentes del peligro de ser
cubiertas por las arenas de los páramos más amenazados por la erosión eólica,
se consolidan éstos con GeoLock. Incluso no es ya ninguna utopía el paulatino
recubrimiento vegetal de tales regiones gracias a
GeoLock. Los grandes ensayos
efectuados en los cuales
GeoLock se arroja desde aviones sobre terrenos desérticos,
abren nuevas perspectivas para el futuro.